Consejos para la prevención de un ataque cardíaco

Una eficiente prevención de un ataque cardíaco, parte de entender dos conceptos. El primero es la importancia del colesterol bueno; hay una serie de grasas que no debes consumir, mientras que hay otras que son muy necesarias para ti, como el Omega 3, puesto que te ayudarán a evitar enfermedades cardiovasculares. El segundo, por otro lado, consiste en un estilo de vida saludable.

Teniendo esto en cuenta, esta nota va a mencionar algunos consejos muy simples, pero efectivos, cuya eficiencia ha sido demostrada de modo reiterativo por múltiples estudios, para que los apliques. Estos son:

• Una dieta balanceada. Para prevenir un ataque cardíaco es muy importante regular la alimentación. Por un lado, es necesario reducir la ingesta de grasas saturadas, sal, carnes rojas, grasas trans, ingredientes hidrogenados y dulces. Adicionalmente, es fundamental consumir granos, verduras, frutas, y Omega 3. El consumo adicional de agua también es muy útil para regular la temperatura y ayudar al sistema linfático en la eliminación de desechos es vital.

• Relájate. Los altos niveles de estrés pueden perjudicar los diferentes sistemas de tu cuerpo debido a que en esas condiciones tu organismo produce hormonas que te alertan e introducen en un “estado de supervivencia”, diseñado solo para períodos cortos. Entonces, si te mantienes en alerta, ira o estrés por muchas horas, tus órganos responsables de la digestión, circulación y auto reparación, pueden fallar. Busca mecanismos que te ayuden a relajar, como la espiritualidad, el deporte, la desconexión o la meditación.

• Deja de fumar. Esta actividad aumenta tus triglicéridos, reduce los índices de colesterol bueno, perjudica células encargadas de cubrir los vasos sanguíneos, además de engrosar o estrechar sus paredes; también forma coágulos, que pueden terminar por interrumpir el flujo normal de la sangre hacia el corazón. Dejar de hacerlo es parte de todo ejercicio consciente para la prevención de un ataque cardíaco.

• Controla tu presión arterial. Una presión muy alta llevará a un riesgo más elevado de ataques y enfermedades cardíacas. Puedes controlarla, evitando el estrés, haciendo ejercicio y llevando una dieta saludable.

• Regula tus índices de azúcar en la sangre. El exceso de esta sustancia puede dañar tus arterias, tanto en casos de diabetes como en prediabetes. Por ello, es importante que reduzcas la ingesta de azúcares industriales; en lugar de esto, busca endulzantes naturales y bebe abundante agua.

• Controla el colesterol negativo. Si te realizas exámenes médicos constantes, encontrarás si tus índices son óptimos o no. Regularlos puede ser vital para cuidar tus vasos sanguíneos, puesto que la sangre lleva consigo rastros de grasas y colesterol malo. Cuando hay altas concentraciones de estos compuestos, se acumulan y obstruyen los vasos, lo cual podría provocar infartos repentinos.

• Ten cuidado con tu peso. La obesidad y el sobrepeso tienen una relación estrecha y directa con las enfermedades cardiovasculares y los infartos. Habla con tu médico, regula tu alimentación y deja de lado la vida sedentaria, para ejecutar rutinas de actividad física.

• Una aspirina puede ayudar. Este medicamento reduce el riesgo de ataque cardíaco porque evita que se formen coágulos en tu sangre. Sin embargo, consulta su eventual empleo diario con tu médico, porque en ocasiones puede llevar a sangrados en exceso. Además, suspéndela si vas a pasar por algún tratamiento quirúrgico, puesto que puede obstaculizar tu recuperación.

• Es mejor prevenir que curar. Una buena prevención, a través de diagnósticos apropiados y exámenes, puede ayudar a que las enfermedades del corazón sean menos probables, así como el riesgo de una muerte súbita.

• Disfruta con amigos. Recientes investigaciones plantean que aquellas personas con vidas sociales más movidas, son más felices y activas, por lo cual tienen una menor propensión a los ataques cardíacos. Salir y hacer amigos no sólo ayudará a tu autoestima y vida social. La vida social también es una clave para la prevención de un ataque cardíaco.

Si esta nota ha llamado tu atención, te invitamos a aprender más al respecto, no solo sobre los males cardiovasculares y sus características, sino también sobre algunos de los métodos más notables que hay en la actualidad en el campo de la prevención. Encuentra todas las respuestas que buscas, visitando nuestra sección Prevención de enfermedades. Tu salud definitivamente te lo agradecerá.